lunes, 10 de noviembre de 2014

DESPEDIDAS


Que gracioso es que durante una plática cualquiera, me acuerde de ti.

Hace algunos días una persona muy cercana a mí, mencionó  las despedidas en las centrales de autobuses, y no pude hacer otra cosa más que acordarme de nosotros, cuando empezaste a viajar y las despedidas eran algo de cada semana, despedidas que después se fueron haciendo más largas las semanas, y más cortos los días que estábamos juntos.

Lo que más recordé fue aquel 12 de junio, había sido una semana maravillosa,  entonces yo  tenía que regresar, pero esa vez, por primera ocasión empaqué las sandalias de baño, la plancha del cabello y mis objetos personales, fue algo extraño, pero no me detuve, creo que cuando lo estaba haciendo no me percataba de la situación.

Recuerdo que salimos rumbo al aeropuerto y antes de salir de casa, dejé mi llave en la mesa de la cocina, junto a la carta que te había escrito una hora antes, para mí ya estaba decidido, era la última vez  que yo regresaría a “nuestra casa” llegamos con tiempo al aeropuerto, documentamos mi equipaje y nos sentamos a esperar que anunciaran mi ida, el final, el vuelo sin regreso; fue la primera vez en 5 años que te importó que era lo que estaba leyendo, me preguntaste por el libro que tenía en mi bolsa, empezaste a platicar de muchas cosas, del trabajo, los amigos, de nosotros, en eso anunciaron la sala, me levanté para empezar a preparar mis cosas e ir a la sala en que tenía que abordar.

Recuerdo perfectamente que pasó después, me tomaste de las manos, y me dijiste esas palabras que había esperado escuchar por tantos años y que en ese entonces si hubiera hecho caso -Quédate, por favor, quédate, después instintivamente me abrazaste, y quitaste mi bolso de mis manos, tratando de hacer un movimiento rumbo al estacionamiento, en ese momento dije -no, no puedo quedarme, te  congelaste, me miraste y solo alcanzaste a decir -¿Por qué?  Nos abrazamos muy fuerte, empezamos a llorar sabiendo que esa  era nuestra despedida, una despedida que llevábamos retrasando hacía mucho tiempo, recuerdo que no te había visto llorar y ese día lloramos los dos, por todo aquello que nos habíamos prometido y no habíamos cumplido, por aquellas pequeñas cosas que habíamos vivido juntos,  que no valoramos y que ya nunca más volveríamos a vivir juntos, recuerdo que me susurraste al oído -Chaparra, no te vayas…

Fue tan difícil para mí separarme y caminar hacia el avión que iba a abordar, no solo porque dejaba a mi gran amor, además sabía que no iba a encontrar a alguien que me entendiera como tú, alguien que con solo mirarme pudiera saber que había tenido un mal día y necesitaba un helado de chocolate, ese que siempre tenías en el refri para mis malos ratos.

Subí al avión, tome mi asiento, lo único que pude,  lloré la hora y media que dura el viaje, cuando aterrice, supe que mi gran amor se había quedado a mil kilómetros lejos de mí.

Pero también entendí que era el momento adecuado para empezar una nueva vida, así que limpié mis lágrimas, me maquille los ojos y camine hacia afuera del aeropuerto con la convicción de que la vida me tenía preparada una sorpresa…



la entrada que acabas de leer fue escrita de forma anónima, el dueño del blog solo se encarga de editar, gracias por sus comentarios. la autora los leerá todos.  

jueves, 28 de agosto de 2014

…AL FINAL DE TODO, HAY ALGO MARAVILLOSO QUE NOS UNE

Siempre es difícil verla, no entiendo Por qué, sí ya aplique todos los procesos psicológicos para poder soltarla, pero aun así ella sigue causando un malestar en mí, NO, ya no es amor, no es odio ni rencor; creo que sólo es nostalgia y un poco de tristeza. Y es que de verdad da tristeza verte ahí sin ninguna expresión más que la de una persona "adulta" manejando la situación, dejando atrás lo que vivimos.

He repasado nuestra historia miles de veces como a las tablas de multiplicar y como tú, he  llegado a la conclusión de que sólo fue un amor estúpido de adolescentes.

No me culpo de nada ni te culpo a ti, intentó sólo sacar esto de mi ser evitando el dolor. Ya no debería doler.

Parecíamos dos extraños, nunca nos miramos (ni nos miraremos)  como la primera vez que la conocí, habíamos cambiado tanto, éramos sólo dos personas más en algún lugar, sin nada que decir ni sentir. 

Así es como las personas rompen ese lazo que alguna vez los unió, convirtiéndose en nada, flotando sobre el espacio. Y yo siendo partícula fui desapareciendo.
No puedo decirte adiós, porque al final de todo hay algo maravilloso que nos une Se lo dejo al tiempo y espacio que sin duda curara esa etapa de mi vida que me hizo ser lo que ahora soy.


Y con lo complicado que es dios, el amor, la vida y el destinó, pisare fuerte a cada paso en mi camino.



La entrada que acabas de leer ha sido escrita de forma anónima, el administrador del blog solo se encarga de publicar. 

martes, 26 de agosto de 2014

MORIR DE A POCO

Te vi y no pude ocultar la sonrisa cuando tus labios pronunciaron mi nombre, no sabía sí tendría la fuerza para contestar, pero pude contestar con un sincero y amoroso "hola" y una gran sonrisa.
Es la primera vez que volvemos a vernos desde que nos separamos (para referencia léase) http://expulsandomisdemonios.blogspot.mx/2014/07/remolino.html
 Y no quiero hacerme ilusiones, quiero proteger mi corazón, pero no puedo controlar las ganas que tengo de abrazarte.

Hasta hace unos días, soñaba con volver  a verte y hoy es una realidad.
Como dice la canción "me puse mi falda más bonita" para ser sincera, tenía miedo de que no llegarás, ahora  estas aquí en verdad, frente a mí.
Vamos a comer y siento que toco el cielo cuando me tomas de la mano para ayudarme a cruzar la calle.

Hay risas, muchas risas, hace meses que no reímos de esta manera, en un trayecto de media hora hemos reído tanto que ya me duele el estómago,  puede que sean los nervios, o amor…

 Vamos a comer, pareciera que el tiempo se detuvo porque por un momento las cosas vuelven a ser como antes y empezamos a platicar de cómo nos ha ido estos meses, me das a probar de tu platillo y sonríes al ver que hago caras porque no me gusta el sabor.

Es en este momento cuando el mundo desaparece y en mi cabeza estamos sólo tú y yo.

Y es aquí cuando al tomarte de la mano digo cuanto te extraño,  digo cuanto me haces falta, te pregunto el porqué de nuestra separación, me contestas que no lo sabes, me abrazas y me dices que  también me extrañas, que no hay día que no lamentes el haberme dejado ir. Me tomas de la mano  para después besarla, así como solías hacerlo, besas mis labios y entonces, me pides que vuelva a tu lado, prometiendo que todo va a estar bien.

Cuando estoy por darte mi respuesta, oigo a lo lejos tu voz, me preguntas que sí estoy bien, es entonces cuando regreso a la realidad, todo lo que describí sólo paso en mi mente.

No hubo besos, ni más promesas de amor.

Pero, tomo tu mano y sin decirte nada digo todo, digo que te quiero, que te extraño y cuando aprieto tu mano, susurro que te quiero a mi lado.

Este día fue maravilloso, volví a verte, nos reímos juntos y por sobre todas las cosas, mi corazón volvió a latir con fuerza... Pero el día acaba,  te despides con un beso en la mejilla y un abrazo.  Es en este momento cuando mis lágrimas ya no pueden quedar en su lugar y te abrazo fuerte, sé que no debo decir "te quiero" y no puedo pedir que te quedes, aunque sé que lo sabes, me susurras al oído que todo va a estar bien, quiero creerlo, te separas de mí, me levantas la cara y limpias mis lágrimas, me pides que no llore, me dices una y otra vez que todo va a estar bien y me pregunto ¿si todo va a estar bien, porque tienes que irte?

En este instante no soporto tu mano en mi cara, no quiero oír tu voz, sólo quiero seguir llorando, hasta cansarme y caer rendida, no soy fuerte,  te necesito a mi lado, pero sé que tu no me necesitas a tu lado,  sé que fue un gran día, pero nunca más se volverá a repetir y tengo que luchar contra las ganas de pedirte que te quedes y decirte con “tranquilidad”  que te vaya bien.

Te amo tanto, que dejo de llorar y aún con ese nudo en la garganta, te deseo suerte, te acaricio el rostro y te doy un tierno beso en los labios,  pidiendo a Dios que te lleve por el camino adecuado.  

Comienzo a caminar entre la gente y la lluvia, yo sé que no es lluvia lo que resbala por mi cara, son lágrimas, corres a darme tu chamarra, y la rechazo, no quiero morir de a poco.
Doy la vuelta y sé que no voy a volver  la vista atrás, porque hacerlo sería morir de a poco.


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lunes, 18 de agosto de 2014

Dos años una eternidad, dos años tiempo fugaz.

Antes dos años sé me hacia una eternidad (hasta ahora). Tan rápido dos años, hace dos años te dije que sí, que sí quería ser tu novia, la historia comenzaba y comenzaba como un cuento rosa, algo desconocido para mí, algo que cambiaría mi vida, una experiencia que jamás olvidaré, lo que marcaría mi vida.

Todo era perfecto, éramos tú y yo viviendo la historia más fabulosa de mi vida, ¿por qué de mi vida? Por qué ya lo diría Mario Guerra 1+0=0, aunque esos primeros tres meses, quién lo diría, siempre me hablaron de esos tres meses, me rehusaba a creer que fuera cierto, por cómo había empezado juraba que podría romper con esa profecía.

Pero ¿Cuál era la profecía? Simple, que lo mejor de la relación son los primeros tres meses, serían como vivir siempre en un cuento de Disney, después de ello, la relación cambia y está propensa a terminar pronto. Ya sé muchos dirán que hay excepciones, posiblemente sí, pero no fue mi caso.
Llegaron esos tres meses y todo cambió, él cambió, estaba en su zona de confort ¿y yo? Simplemente no quería perderlo, era y es lo mejor que me ha pasado.

Más que una historia común en la que dos personas estaban complementadas y juntas,  la relación generaba los comentarios de "te ves tan feliz”, “te cambió la vida, ahora sonríes más", "sé ven tan bien juntos", "ahí te quedaste, es el indicado", etc., etc., etc.

Quiero compartir como terapia lo que siento en esta fecha tan especial, sí, la relación terminó al año y ¿luego qué? pero él más que haber sido el novio perfecto es el hombre de mi vida, el hombre que quería fuera mi compañero de vida, el padre de mis hijos, dueño de mis mensualidades  y una larga lista de románticos clichés.

Ya pasaron demasiados meses de que mi cuento tuvo fin, fue doloroso, no comprendía qué había pasado, me quedé con muchas dudas, hasta la fecha sigo dándole vueltas sin caer en profundizar, mucho menos en indagar. De ser el hombre perfecto, pasó a ser el cretino que siempre conoces en algún bar, antro, fiesta, aquel sólo quiere tener sexo.

Pasé por muchas etapas, el desconcierto, la tristeza, el enojo, la locura mental, la decepción, la culpa, a pesar de eso  pude salir de la mejor forma que creí, aunque siento que algo me faltó, sigo con sentimientos encontrados en un segundo plano pero que siguen ahí.

Hoy sé que esa historia no tendrá una segunda parte puesto que hay alguien más, ¿cómo lo sé? Tuvo el valor y cinismo de decírmelo mientras me hacia una deslumbrante invitación a Seúl para vacacionar con él. Ahí fue cuando descubrí al cretino que lleva dentro. Sin embargo en cierta forma lo agradecí, obviamente no se lo dije pero fue la fortaleza que necesitaba para detener mi tren cargado de ilusiones, ya que los vagones traían los supuestos de "sí le importó", "qué tal si quiere regresar", "recapacitó y se dio cuenta que soy la mujer de su vida", "me sigue queriendo", "me extraña", bla, bla, bla... Por supuesto que no fue así, llevando a mi tren al vacío.

Hoy después de repensar todo, simplemente me quedó con lo bueno y genial que hubo en la relación, extraño su ser, su cuerpo, su calor que aunque hiciera frío él generaba un calor único, sus besos que aunque eran medio babosos me gustaban, sus abrazos acogedores, su interés por retarme a ser mejor, sus regaños, sus pláticas sobre sus viajes (gracias a ello en la aplicación de preguntados he podido contestar acertadamente), ver sus hermosos ojos, su risa sarcástica, su risa natural, su hermoso cabello cano, sus movimientos en la intimidad, sus caricias; cualquiera que lee esto podría jurar que sigo enamorada, no lo dudo, pero ya no me genera el mismo cosquilleo al hablar o escribir de él. Pero sí creo que el día que pueda superarlo podré pasar frente a su casa,  saludar a mis amigos, el día que lo vea con su pareja, o el día que lo tenga de frente.

En fin hoy hace dos años fue el día más maravilloso de mi vida, aún recuerdo su festejo crédulo al decirle después de dos meses que aceptaba ser su novia, el abrazo más sincero y feliz que había sentido en la vida.

Hay que vivir el presente, él ya no está junto a mí, es feo salir del trabajo y no correr a la calle donde me esperaba para irnos al cine, a cenar, a tomar unos tragos para celebrar mi nuevo empleo, o simplemente porque así éramos. Ya no llegaré a su casa con el té chai late que tanto le gusta para desayunar o más bien almorzar porque siempre sé me hacía tarde, no me sentaré en nuestra cama a ver the big band theory, criminal minds, y mucho menos verlo dormir mientras la luz de la luna iluminaba su rostro tranquilo. Ya no más...

Gracias por el tiempo que juntos pasamos, de nada por sacarte del hoyo en el que estabas y que ahora puedas atreverte a tener una relación sana
.
El próximo mes, se cumple un año de haber terminado.                            


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viernes, 25 de julio de 2014

Remolino

Hoy me siento en un remolino… y no el mejor sentido de la palabra, cuando te conocí, no estaba en mis planes enamorarme de ti, si, eras lindo, caballeroso, atento, cálido y hasta sensual, me atrevo a decirlo; quien se aprovechó de quien, es algo que no creo que nos quede claro, pero pasó y me enamoré  como estúpida y así sin meter las manos, pero si  metiendo el corazón, a pesar de que lo han roto demasiadas veces.

 Hoy, después de meses felices, de una que otra discusión y de más cosas buenas que malas, estoy aquí, preguntándome si debo seguir o no, te preguntaras el porqué, aquí enlisto mis razones:

1.- Ya no platicamos, cuando te digo que te extraño, no siempre me refiero a físicamente, si bien es cierto que viajas mucho y que no estamos juntos más que los fines de semana, extraño las pláticas que solíamos tener, cuando me contabas como te había ido en el trabajo, que habías hecho alguna tontería o que simplemente querías platicar, ahora, ya no existe eso.

2.- En algún lugar perdimos la confianza, antes era yo la que se enteraba de prácticamente todo y cuando decías algo, yo ya lo sabía, ahora, me entero de lo que te pasa o de lo que haces por tus amigos; ¿dónde quedo la confianza de antes, la confianza de cuando éramos dos perfectos desconocidos conociéndose?

3.- Es cierto que ahora tenemos más planes juntos, pero sin las dos cosas anteriores (conversaciones y confianza)  no siento la seguridad de que esos planes vayan a volverse realidad, me da pavor despertar un día y ver que te haya perdido y que sea más insoportable estar juntos que estar alejados.

4.- ¿Cuándo dejamos de hacer cosas espontáneamente?, a decir verdad no lo sé, solo sé que dejamos de hacerlo y nos volvimos, no monótonos, serios seria la palabra adecuada. Sé que no soy extrovertida como tú, pero me encantaba hacer cosas nuevas contigo, porque estaban cargadas de magia.

5.- sé que tienes círculos pendientes de cerrar, y que no los cerraste en su momento, sé que tu pasado regresa, pero también me doy cuenta que con todo esto te alejas más y no son mis círculos, no puedo cerrarlos por ti, no puedo pelear tus batallas, puedo apoyarte y estar contigo, pero en este momento es cuando más lejos me siento de ti; dije que no me iba a ir, pero no puedo con tantos demonios, no puedo con tanta rabia, con tanto dolor.
Quisiera que no me lastimara, que no me doliera, pero no es así, te veo sufrir y no es que sufra contigo, es lo que haces o dices y no te das cuenta como rasga, como duele, y por más amor que yo esté dispuesta a darte, parece no ser suficiente.

6.- Los planes ¿dónde quedaron nuestros planes? si te digo en la semana que quiero ir a bailar, llega el fin de semana y se te olvida. Es cierto que yo quiero a alguien que me abrace fuerte y haga que me den ganas de quedarme con él en casa, ver una buena o mala película y que me abraces al dormir, pero hoy día ya no puedo dormir junto a ti, parece que hay una barrera infranqueable entre nosotros, una tensión que no sé dónde se origina.

7.- Amo los días que estamos bien, y esos días te amo con todo mi corazón y entonces me llenas de ganas de seguir intentándolo y son los días perfectos, aunque solo vayamos a hacer cosas rutinarias, pero esos días tienes una mirada y una sonrisa en tu rostro, lo malo es que esa mirada y esa sonrisa se han ido perdiendo, y las busco, las busco con locura, porque te quiero recuperar, pero como una gota de agua, se me escapa de las manos. Amo esos instantes.

8.- Entiendo que sí, la niña no se siente cómoda conmigo, pero ¿sabes?, a tu hija la quiero e incluso la respeto tanto como si fueras tú, ella es un ser maravilloso y entiendo cuando se enoja conmigo por robarle el tiempo que debería corresponder a estar con papá, es por eso que trato de incluirla, de considerarla en lo que hacemos y en lo que planeamos, pero no es suficiente, para ninguno de los tres.

9.- No eres el único responsable, también yo me he alejado, pero me he alejado porque no quiero lastimarte y que me lastimes, sé que soy una granada, que explotare y entonces todo a nuestro alrededor quedara destruido.
Es por eso que te estoy citando hoy, porque quiero hablar de todo esto contigo, pero mira la hora, son las 10:00 pm y quedaste de llegar a las 8:00 pm, entiendo que el trabajo, el camino, el transporte, pero lo que no entiendo es que no puedas llamar para avisar que no llegaras.

Como veras, entiendo muchas cosas, y tú entiendes que soy mujer y que necesito un “buenos días” un “ te quiero” necesito un abrazo,  cuando digo no me pasa nada es porque me está pasando todo,  cuando no dejo que me veas a los ojos, es por que pase toda lo noche llorando,  cuando te veo fijamente a los ojos, es porque estoy esperando una respuesta que no se si llegara,  si te cedo el control de la tele es porque no quiero ni siquiera discutir por eso.

No se supone que llegáramos tan pronto a esto, se supone que íbamos a luchar, que íbamos a intentarlo… que nos íbamos a entregar sin reservas…
Es por eso que  escribo esto, porque sé que las encontraras al llegar a casa y cuando te vayas a descansar, ahí estarán, lo que no sé es si yo voy a estar para hablar.


miércoles, 23 de julio de 2014

50 Sombras de Grey, como arruinar la literatura erótica. Porno para esposas de monotonía sexual.

Desde que esta trilogía salió a la luz, no me llamó la atención, para comenzar por el título y al final por el tema del que trata el libro. Pero cada que voy a buscar cualquier libro, está en el top de ventas del mes o la semana, claro me imagino que las ventas subieron por el hecho de que se va a estrenar la película y el morbo a saber de qué trata en si la llamada “novela erótica” tan popular en estos últimos tiempos.


En primer lugar, me llama mucho la atención la cantidad de personas, bueno mujeres, que están tan fascinadas con este personaje ficticio, al grado de cambiar su apellido por “Grey” o “De Grey”, ya que tal gusto por ese “hombre” las lleva al punto de no querer estar con nadie más que no sea este. Viven tan encerradas en esta fantasía del hombre millonario que llega a cambiarles la vida en todo aspecto a cambio de ser sumisas y atenderle en todo lo que sea necesario o posible para complacerlo en todo lo que pida.


Y de igual forma, supongo que esperen en pago más que cosas materiales, el hecho de que el igual cambie su forma de ser en todo aspecto, al grado de sólo quedarse con ella. Y como dije al inicio, no se permiten el tener a su lado a alguien por tener en la mente a Christian Grey, al grado de ni siquiera disfrutar el estar con alguien “real” porque la experiencia no se acercó en lo más mínimo a lo que piensan que podrían llegar a sentir con este personaje.


Así que me di a la tarea de investigar entre familiares, amigos y conocidos sobre estos libros también conocidos como “pornografía para mamás”. Y ver si de esta forma puedo llegar a comprender un poco el porque el repentino furor hacia esta saga.


El fin de semana, mientras platicábamos de las películas y espectaculares que hay en el cine, mi hermana mencionó con marcada emoción que ya el próximo año se estrena la primer película de dicho libro; lo que me llevó a preguntarle lo siguiente: ¿qué tienen de interesante estos libros? A lo que ella me respondió que para ella no tenía nada de erótico, ni abundaban las escenas sexuales, que más bien para ella la “magia” del libro radica en que a todas las mujeres nos gustaría alguien como él, que cambie o deje todo por estar sólo con la persona de la que se ha enamorado. Claro, esto desde el punto de vista de alguien en particular.


De la misma manera, pregunté entre otras personas, y me sorprendió lo diversas y marcadas que son sus opiniones con respecto a este tema. Por medio de 3 preguntas les pedí que me contaran su experiencia en el tema, y son las siguientes:
  • A tu forma de ver ¿qué tiene de interesante la trilogía?
  • ¿Crees que la historia y los personajes valgan tanto la pena como para desear que estos sean reales?
  • ¿Por qué crees que se llame “pornografía para mamás”?
Y como era de esperarse, las respuestas se dividieron a favor, en contra y otras como que si les gustó pero no les gustó.


Comencemos con las opiniones a favor:
  • Para alimentar el sueño de muchas mujeres, de que por ellas cambian su forma de ser. El lenguaje es sencillo, te atrapa la historia tan atrevida y excitante, los personajes los vives. En lo personal no podía dejar de leer.
  • Algunas mujeres mueren porque exista un Christian Grey, además de que se surte de lana, y por cogerte te regala un Audi ¿quién dice que no? Y dicho de forma vulgar, la tiene grandota y no sólo la cartera… y te puede coger todoooo el día, en promedio se echa 13 sin chistar.
  • Se puede decir que es pornografía para mamás, porque detalla en una forma hasta cierto punto rosa de sexo en sus distintas modalidades, sobre todo tratándose de juguetes y juegos de sumisión.


En las opiniones en contra incluso tratan de analizar al personaje principal.
  • Yo lo leí por morbo, porque quería saber qué era eso de lo que hablaban, donde el millonario se enamora de la inocente. Honestamente no me gustó, es la versión porno de Crepúsculo.
  • No, porque no analizan el personaje a fondo, sólo se dejan llevar por cosas superficiales como el dinero, el físico, el sexo. Es un libro muy misógino, es la fórmula perfecta. Es la historia de los cuentos, sólo que la trasladaron a algo más “real”, el multimillonario que además de ser “buen amante” da todo lo material que ella quiera, y al final se queda con ella, no vale la pena que haya mujeres que mueran por un Christian Grey que las castigue y les haga firmar contratos.
  • Creo que se debe a que como es una novela “romántica” con mucho sexo, ya sabes, lo que toda cuarentona soltera desea; que llegue un súper macho millonario que cumple con todas las expectativas. Y para algunas mamás, es un tabú el lado sexual y a pesar de que la descripción de los encuentros sexuales no es tan gráfico, pueden imaginar eso que no se atreven a hacer.


Opiniones “ni muy, muy ni tan, tan”
  • Pues como cuento de hadas está muy porno, como pronografía, cae en el romanticismo. Y leyendo el primer libro la historia se torna interesante sobre los gustos sexuales de Christian Grey eso es lo que yo creo que lo hace interesante porque actualmente nadie habla sobre su vida sexual.
  • Pues es como aquello del ser y deber ser; que bueno que existiera algo así, pero pues no. Termina siendo una telenovela de Televisa, pero en papel.
  • Pues más que pornografía, es para pasar el rato, bueno, ciertos capítulos, me mantuvo entretenida. A lo mejor quieren explorar ese lado sexual del que habla el libro. Que si lo piensas bien, no se necesita un dichoso Christian Grey sino tener una pareja de mente abierta.


Lo cierto es que cuando a todas les hacía la pregunta obligada “¿Llevarías a la vida real la actividad del libro?, es decir ¿serías la “sumisa que complace al señor?” Sin dudar, respondieron que no, ya sea porque no son complacientes o porque no va con ellas.


En particular, llamó mi atención la opinión de alguien que en verdad detesta estos libros, ya que me comentó que después de haber tenido una experiencia poco satisfactoria, su acompañante prefirió sacar el celular (en donde tenía o tiene los libros en PDF) y se puso a leerlos en voz alta, a la mejor para compartirlos a la mejor para darle a entender que era lo que esperaba. Y regreso a la idea principal de escribir esta entrada: “¿En realidad hay quienes prefieren ocultarse tras un personaje imaginario? ¿Ya se sienten muy experimentadas leyendo como la gente tiene orgasmos en lugar de buscarlos o provocarlos?


En fin, por el motivo que sea, al final se está logrando el resultado deseado, ya que vende y logra tener atrapado a cierto sector de la población.


Para ser franca, aún dudo en leer los libros, creo que no es lo mío, por lo menos no la clase de historias que me atrapan como para no dejar el libro hasta terminar la última palabra. Si en algún momento lo llego a leer, prometo escribir mis propias impresiones de la historia y si es necesario, retractarme o enfatizar en lo que pienso del personaje ese y su affair con la “chica tímida”.

¿Tú que piensas?, me gustaría saber tu opinión.

La entrada que acabad de leer ha sido escrita de forma anónima.

viernes, 18 de julio de 2014

¿Estudiar, para qué?

Es mujer ¿para qué la mando a estudiar? Va a casarse y tener hijos.

 Escuché dicha frase muchas veces,  no crean que en algún lejano pueblo en medio de la nada no, lo llegue a escuchar en restaurantes, en la calle y hasta en mi propia casa, no de mis padres, sino de mi abuela. Ella le externó a mi papá que no me mandara a estudiar, porque; o iba a salir embarazada o me iba a casar, hoy a varios años de distancia  y como profesionista, agradezco sus palabras  porque me hicieron aferrarme a ellas para luchar cada vez que sentía que no podía.

Sin embargo, hoy una mujer a quien quiero mucho, me sorprendió con una pregunta similar ¿Debería seguir estudiando?  sé que ella se refería a seguir estudiando algo referente a la profesión, sin embargo, creo que no solo debemos estudiar para obtener un grado académico, debemos  estudiar, investigar, desempolvar las neuronas,  porque somos seres que estamos en constante movimiento y que tenemos  por lo tanto esa sed de aprender.

Quieres aprender a tejer esa bufanda que te encantó, inténtalo, créeme que no te va a quedar divina a la primera, tendrás que hacer una segunda o una tercera, pero aprenderás y lo mejor es que conocerás a personas que son verdaderos eruditos en la materia.

Si quieres aprender a cocinar, toma clases de cocina, o si quieres aprender a nadar…hay tantas cosas que desconocemos y que no sabemos cómo hacer y no está mal aprender.

¿Por qué tenemos miedo de preguntar? lo mejor que te puede pasar es que preguntes algo y alguien te sorprenda con una respuesta tan buena, que te den ganas de aprender más de ese tema.
No me refiero solo a aprender acerca de tu profesión, sino a aprender acerca de lo que te apasiona en la vida.

Así que mi respuesta fue: ¡claro! Debes seguir estudiando, pero estudia lo que tú quieras, no lo que quieran o esperen de ti los demás, porque eres tú la que va a estudiar.

Así que hoy les digo que tengo que dejarlos, porque mis clases de baile, me esperan.




La entrada que acabas de leer es anónima.

miércoles, 2 de julio de 2014

DEXTER ¿Alguien de ustedes ha visto la película “Siempre el mismo día?

Bueno la trama es sencilla, dos personas que se conocen y se vuelven grandes amigos, hasta que él se da cuenta que todo lo que quiere en su vida es a ella,  luego como buena película romántica, hay una desgracia,  hasta ahí llego el amor, los protagonistas son Emma y Dexter.
Esta semana vi a mi Dexter, ese hombre al cual amo con todo mí ser,  no puedo tenerlo,  no es por falta de ganas, cariño o interés, mas bien nuestro destino  es NO estar juntos.
 ¿Qué cómo lo sé? Porque tenemos una historia de 18 años, en la cual solo hemos podido estar juntos un par de instantes…

Lo conocí una tarde de Agosto, si mal no recuerdo, acababa de entrar a la vocacional,  muy mona yo  me inscribí a un taller literario (en ese entonces no sabía que era y hoy menos) mi intención no era conocer a alguien solo apareció, con su sencillez y su forma tan amarga de ser, no me enamore al instante de él, con el tiempo y la convivencia logro que me enamorara de él. No fue fácil, más bien fue difícil, teníamos todo en nuestra contra, el horario, nuestras carácter, nuestras historias, nuestra vida y sobre todo nuestros sueños, aun así lo intentamos.

En ese entonces, aún no eran tan accesibles los teléfonos celulares, por lo que solo nos veíamos en el intermedio cuando él salía de la escuela y yo entraba, mi primera cita con él fue ir a la biblioteca México.  ¿Quién te lleva a una cita a una biblioteca? Pues él lo hizo, y he de confesar que fue mejor de lo que yo creía.

Sin embargo, ese primer acercamiento solo nos duró unos meses, cinco o seis, no recuerdo con exactitud y nos separamos. Él salió  con alguien más y yo con algunos más, nuestra sorpresa fue volvernos a encontrar  tres años después, cuando ambos estábamos en la escuela superior, él sin ella, pero yo aún con alguien. Fue increíble lo que sentí cuando me abrazo y pude sentir su cuerpo junto al mío, porque nunca supe cuanto ansiaba esos abrazos hasta aquel momento.

Cuatro años después volvimos a ser víctimas de  la fatalidad de nuestro destino y nos reencontramos, parecía que el destino ahora si había hecho su parte, ambos estábamos solos y decidimos volver a intentarlo. Fue simplemente mágico, ambos habíamos “madurado” o al menos eso creíamos, teníamos el futuro para nosotros, seguía necesitando esos brazos, esos besos y a ese hombre. Y, un día sin saber por qué lo dejé. Sí, fui yo la que lo dejó, no me importaron sus sentimientos, sus ruegos ni nada.

Pasaron cerca de siete años, en los que yo triunfe y fracase en todos los aspectos de mi vida, en los que hubo más historias y en los que  nunca pude perdonarme por haberlo dejado. Con  las redes sociales, nos volvimos a encontrar, cabe mencionar que fue el quien dio el primer paso, debería odiarme por lo menos, pero no, él no es así. Y cuando nos volvimos a ver, me sentí como esa niña que lo conocía hacia tantos años atrás.

Cuando me  abrazo, fue como si el tiempo se detuviera, como si nunca nos hubiéramos separado, como si el destino nos tuviera preparado ese momento y por fin lo estábamos viviendo, para desgracia nuestra, ambos estábamos con alguien y por respeto a esas terceras personas en cuestión, decidimos no seguir más.

Sin embargo sigue siendo la persona a la que recurro cuando algo está mal y yo sigo siendo la mujer con quien el quisiera estar. Por eso es mi Dexter, porque a pesar de que sabemos que queremos estar juntos, no queremos que nos pase una desgracia. Yo puedo ser yo con él y él puede tener miedo conmigo.

Saben ¿cuánto  duele decirle “Te quiero” a la persona que más amas y que te ama con la misma intensidad y saber que nunca podrán estar juntas?

Sabiendo que por más que se esfuercen, lo más que puede pasar son instantes, que esos instantes es lo único que tendrán, qué no hay nada que desees más en este mundo que él sea feliz aunque no sea a tu lado.

Sé que en algún momento, mi Dexter encontrara a la mujer que está buscando  y sé que no seré yo, porque si fuese yo, acabaríamos con este amor que nos tenemos.
Así que hoy solo puedo dar gracias por tenerlo en mi vida y porque aún tenemos nuestros instantes.

la entrada que acabas de leer fue escrita de forma anónima. 

viernes, 20 de junio de 2014

SOLTERA Y QUE

Si cobrara 5 pesos cada vez que alguien me pregunta por qué  no tengo marido, novio, amante o algo que se le parezca, ya hubiera viajado por el mundo unas 3 veces.
Tengo 32 años y no tengo ninguna relación estable con nadie, y cada día alguien me pregunta: ¿Y tú novio? A lo que yo contesto, no tengo y entonces viene el -¿pero por qué? (Léase con voz de sorpresa) mis ojos inmediatamente se ponen en blanco y contesto.
 -porque no quiero un novio.

Para ser honesta, es una pregunta que cada vez que la escucho me molesta más y más,  no porque tener un novio sea malo, es solo porque no entiendo cómo es que en pleno siglo XXI una mujer necesita tener un hombre a su lado. Hemos peleado tanto por la llamada “igualdad” y equidad de género y por demostrar que las mujeres podemos hacer el trabajo que antes estaba destinado solo a los hombres, que no comprendo el por qué es estrictamente necesario que todas tengamos pareja.

Yo puedo decir que estoy contenta con mi soltería, y que disfruto un café o una salida al cine yo sola, que me encanta levantarme un sábado y quedarme en cama sin tener que arreglarme porque alguien viene a verme, agradezco no tener que comer algo que no me gusta solo porque alguien quiso comer eso.

Soy una mujer integra y entera, que puedo pagar un helado, o que puede pagarse unas vacaciones y disfrutarlas. El hecho de que para la sociedad seamos mal vistas las que después de los 30 aún no tenemos pareja o hijos, me deja un mal sabor de boca, pero veamos el contexto,  casi todo en la sociedad está hecho para parejas… que tal el 2x1 en el cine, o las mesas en los restaurantes, siempre están en pares, intenten llegar a un restaurante y sentarse en una mesa para cuatro y díganle al mesero que solo es una persona, inmediatamente les pedirán que pasen a la barra donde la atenderán “más rápido” ¡no! no quiero que me atiendan rápido, quiero disfrutar mi comida; y que tal los paquetes para vacaciones, que si vas en pareja  es más económico.

¡Por favor!  no se supone que somos seres individuales, que valemos por lo que somos y no por con quien estemos.

Claro que he tenido pareja y he sido muy feliz en cada una de esas relaciones, he aprendido mucho de cada una de las personas con las que he estado, pero en este momento quiero aprender de la persona más importante para mi vida, yo misma.

Las presiones sociales, van desde cosas tan burdas como un ¿espera a alguien más?  ¿Porque no bajas de peso, a la mejor así alguien te voltea a ver?   Tú no agarras ni una gripe,  deberías salir más seguido,  pues deberías regresar con ese novio que no era tan malo, de eso a nada, hasta los propios doctores que te dicen ya te tienes que embarazar.

Sin embargo a pesar de que todas las mujeres sabemos que podemos ser felices sin alguien a nuestro lado, a veces nos gana esa presión social y empezamos a buscar a cada “individuo” y no es que ellos sean malos, es que nosotras los escogimos por las razones equivocadas.


No estoy en contra de las parejas o a favor de que todos seamos solitarios, solo quiero que si me ven sola, no asuman que no puedo tener un hombre a mi lado, o que no los puedo retener, solo quiero que entiendan que es mi decisión y que así soy feliz.

la entrada que acabas de leer fue enviada de forma anónima, cualquier forma de contacto con la autora por medio de la caja de comentarios. 


martes, 10 de junio de 2014

PERDIDA

Cuando me dijeron, escribe, así es más fácil sobrepasar cualquier cosa, yo pensé: “¿Esta Loco?”, pero después de casi 20 años escribiendo tristezas, alegrías, fracasos, me doy cuenta, que sigue siendo mi escape más sano.

Podría empezar por hablarles de mi perra que se murió, o de la vez que quería salir corriendo de casa por la friega que me acababan de dar, pero creo que mejor hablare de lo cerca que estuve de perderme a mí misma.

Sucedió hace 8 años, era yo una joven de tan solo 24 años, que quería comerse el mundo entero, que sentía que todo podía hacerlo y podía lograrlo, y así era, tenía un trabajo que reconocía mi capacidad mental y que me remuneraba por eso, gente a mi cargo que reconocía que mi edad no era impedimento para saber y para dirigir. Aun así yo quería más (no sé por qué los seres humanos siempre queremos más); así que entonces conseguí un novio, alguien con quien “compartir”, eso era lo que yo quería y así fue al menos un tiempo.
Un corto tiempo, porque entonces empezó a haber ciertas señales que no quise ver, y digo no quise, porque ahí estuvieron todo el tiempo, y todos las vieron, menos yo; empezamos con el típico “oye estas un poco llenita”, y por qué no dejas de comer X o Y, y vino una dieta y después el ejercicio, si ya se, eso es bueno, pero no es bueno, cuando es impuesto y cuando lo haces por agradar a alguien más.

Con el ejercicio y la dieta, vienen las consecuencias, pérdida de peso, traducción, uno se vuelve flaca y entonces la siguiente frase: “Hay que cambiar de guardarropa”, y un día entero cambiando mi manera de vestir, en ese momento no lo vi, pero me estaba disfrazando de alguien que no era, me veía en el espejo y no me reconocía.

En el momento en que ya era la “mujer que él merecía” deje de ser yo y me convertí en su muñeca, una mujer que no sabía quién era y que seguía haciendo lo que mi hombre quería, porque hay que mantenerlos contentos, es lo que siempre me dijeron, y empecé a desaparecer, a ser alguien que no era yo, que no se divertía y que no sabía que estaba pasando.

Pero esto no es lo peor, ah no, perderse y dejar de ser yo misma, no es lo peor que me ha pasado, lo peor vino dos años después de estar con “mi amor” por qué solo quería lo mejor para mí, si claro, lo mejor para mí y un día cuando no hice caso por algo que me dijo, se desato el infierno, el primer golpe, una cachetada para ser exactos… aún el día de hoy no sé qué ocurrió, en que momento  o por qué razón yo recibía un golpe de aquel que juraba amarme, yo sabía que no estaba bien, pero no razonaba, no coordinaba y tampoco pensaba.

Obvio pidió perdón mil veces y 999 lo rechace, pero en la vez número mil, lo perdone, y entonces las cosas fueron miel sobre hojuelas, así que pensé que solo había sido que había tenido un mal día.
Pero no fue así empezaron las amenazas sobre a quién vez, con quien estas, que haces y ahora el miedo era que la cachetada se convirtiera en una golpiza, no tardó mucho en que así fuera,  unas vacaciones que nos tomamos,  y sucedió lo inevitable. Estuvimos discutiendo todo ese día por una y cien cosas,  y en la noche, antes de acostarnos, yo reclame algo, no recuerdo que y entonces vino el infierno, una cachetada, antes de poder reaccionar otra más, gritos y más golpes, me golpeo en la cara, en las costillas, el estómago, las piernas, y me mordió la espalda, ah, pero como yo soy bien macha no deje que me pegara sin pelear (que pinche orgullo), así que como pude, lo mordí, le pegue y hasta le avente mi plancha para peinar, sí que “orgullosa me siento de mi”; si es sarcasmo,  porque ese día fue el peor día de mi vida, mientras estaba encerrada en el baño, llorando y tratando de lavarme las heridas y de que el agua se llevara todo lo malo que me acababa de pasar, por mi mente pasaban cada una de las señales que debí haber visto, cada uno de los focos rojos que se prendieron y yo omití, y entonces, con la dignidad por los suelos, a la única que podía culpar era a mí misma.

Esa noche dormí en el baño, en el suelo, junto con mi dignidad y mis ganas de seguir adelante, al día siguiente, ya con las heridas visibles (rasguños, moretones, golpes y con el cuerpo tan pesado), la persona que había sido el artífice de aquello con todo el amor del mundo me baño y me curo las heridas, las superficiales claro está, y lo deje, deje que me bañara y que me curara y que no se viera tan mal mi cara. Ahí fue cuando descubrí como algunas mujeres tapan sus heridas con el maquillaje, y listo, no había pasado nada en mí.

Al regreso al mundo real, donde ambos trabajábamos y donde nadie sabía de lo que me había sucedido, decidí que no quería continuar con esa vida, así que las salidas tarde del trabajo y las juntas interminables aparecieron. Para este momento, yo no quería que nadie supiera lo que me había pasado, tontamente creía que mis amigos me juzgarían por tonta y dejada, así que no hable del tema, hasta que se convirtió en una carga tan pesada que tuve que decirle a las personas en las que más confiaba, y para mi sorpresa, no me juzgaron, todo lo contrario me ayudaron a superar este trago amargo.
A pesar de que en mi cara pareciera que no había pasado nada, en realidad esa noche me paso de todo, y una parte de mí se rompió y nunca volví a ser yo, dentro de esa golpiza, algo se fracturo en mí y no se ha podido reparar.

Hoy día sé que no fue mi culpa que me golpeara, pero si fue mi culpa permitir creer que necesitaba cambiar para que me quisiera, y sé que también fue mi culpa perdonar el primer golpe…


Hoy, aún no estoy curada, porque aún sigo culpándome de tantas cosas que pasaron, pero leí una frase en un libro que dice “Hay pasos que debemos dar nosotros solos”, así que yo aún estoy dando esos pasos y que sé que me llevaran a una mejor versión de mi misma.  


la entrada que acabas de leer fue escrita de forma anónima, yo solo gestiono el blog. 

Expulsando mis demonios: la catarsis para poder vivir en este mundo tan caótico

Expulsando mis demonios: la catarsis para poder vivir en este mundo tan caótico


Creando esta primera entrada deseo que este blog sea una catarsis, que me ayude a mantenerme con vida en este planeta tan caótico, no voy a escribir para hacerte reír, ni para hacerte llorar, no voy a buscar millones de lectores como objetivo primordial, solo quiero expulsar mis demonios, romper paradigmas, darme cuenta de todo lo que he logrado con el paso del tiempo, hacer un recuento de mis amistades, los amores, los enemigos y los némesis que se han cruzado en mi largo y espinoso camino.

También contare mis alegrías, mis anécdotas, mis recuerdos más felices y mis fantasías del día a día.

Si te sientes identificado o identificada con lo que leas en este blog, felicidades quiere decir que estas disfrutando la vida y que estas aprendiendo de los errores del pasado.

todas las entradas que leerás son anónimas, yo solo gestiono el blog.